TARTA "ERES UN SOL" PARA UNA MADRE MUY ESPECIAL

A pesar del calor que está haciendo estos días, el verano ya va llegando a su fin y todos vamos volviendo a la rutina. Y es que, a pesar de lo bien que se está de vacaciones, ya iba teniendo ganas de ponerme de nuevo a tope con mis dos tareas principales: el cole y la repostería.
Y qué mejor manera de ir despidiéndonos del veranito con una sonrisa que hacerlo preparando esta tarta tan veraniega que mi amiga María me encargó por el 62 cumpleaños de su mami Pilar, que "es todo un sol".
La tarta está compuesta por un bizcocho de madeira de fresa bañado con un almíbar de ron y azúcar, rellena y cubierta de una buttercream de Nutella. A su vez, la cubrí de fondant amarillo e hice los detalles de la cara con fondant blanco y rotuladores de colores comestibles. Para hacer los rayos del sol, se me  ocurrió hacer unos muffins de mantequilla con chips de chocolate y colocarlos alrededor de la tarta (los rayos, que pegué sobre cada muffin, los hice con el mismo fondant amarillo con el que está cubierta la tarta, utilizando para ello un cortador de calas, que he usado para muchísimas cosas y que está más que amortizado).
Mi amiga me dijo textualmente que su madre "es un sol", así que no quise dejar pasar la oportunidad de incluir esta pequeña declaración de amor en mi tarta, así que hice un cartelito de fondant, escribí el mensaje con rotulador comestible verde y lo pegué a un ladito en la carita del sol. Y como sabéis que me gusta personalizar siempre cada tarta que me encargan, no podía dejar de añadir el nombre de la homenajeada y la edad que cumplía, pero, ¿dónde podía ponerlo? Pues decidí que una forma original de hacerlo sería escribirlo, de nuevo con rotuladores comestibles de colores, en los rayos del sol.
Yo no se a vosotros, pero a mí con tan sólo mirar esta tarta me invade una sensación de buen rollo y me da ganas de ponerme a cantar (rodillo en mano): un rayo de sol, oooh, me trajo tu amor, oooh...
¡Feliz fin de semana a todos!